Francescoli pone en riesgo su imagen, y deja en peligro su estadía en el fútbol

Como pocos, Enzo Francescoli es palabra mayor en Uruguay y se ha ganado su reconocimiento en el mundo del fútbol sudamericano. La sutileza como futbolista lo hizo un jugador único, e incluso por estos días hay recuerdos muy presentes de cada una de sus presentaciones con las diferentes camisetas que vistió.

Por lo hecho en la Selección de Uruguay se ha ganado un lugar entre los más grandes de la historia, por sus goles, por los títulos y por la forma en que lo hacía en cada partido, con sello y firma de autor. En River de Argentina se convirtió en uno de los máximos ídolos del club, tal es así que su imagen está en las principales banderas.

Lo grande que fue Francescoli, se termina de tomar dimensión en el fútbol argentino y en los hinchas del Millonario precisamente, debido a que a fines de los años noventa, una infinidad de padres le pusieron como nombre a sus hijos, Enzo. Claramente, en una muestra de amor al futbolista y en cierto punto a modo de devolverle algo de todo lo que les dio.

El ex atacante por estos días es el encargado de la gerencia en la dirección técnica, de asesorar y recomendar futbolistas, directores técnicos y de aportar una mirada repleta de experiencia para que luego se vaya al accionar con las conclusiones establecidas, pero por estas horas ha tomado una decisión arriesgada.

¿Qué fue lo que hizo Francescoli?

Desde hace algunas semanas se habla de la posibilidad de que Enzo Francescoli está tras los pasos del defensor central uruguayo Sebastián Boselli, recientemente campeón con la Celeste Sub 20. Al tratarse de un compatriota, es posible que se lo juzgue por demás en River en el caso de que el futbolista no esté a la altura de las expectativas y la responsabilidad será adjudicada a su persona.